Yo me cago en Ultraversal, no puedo hacer otra cosa, llega un momento en el que no decir nada me hace sentir una víctima más de su autoritarismo y nunca me ha gustado ser una víctima...
Me cago en ese gueto de mamoneo, postureo y aspiraciones de
integración y escalada social; de personas que renunciaron a escribir por lo
que son para escribir por lo que los demás esperan de ellos. Putos sumisos de
dos grandes fascistas que escupen al insumiso, al que ama su arte y lo crea
libremente, fascistas que lanzan a sus perritos falderos contra el artista
libre para abrumarle, generarle dudas sobre su creación, arrastrarlo al barro
en el que ellos se ven atrapados y que pretenden abandonar a base de disciplina
“artística”; quieren hacerle sentir un mediocre para luego invitarle a su secta
y que se sienta uno más que debe auto-curar su creación...
Asesinos de artistas, fascistas literarios... no ganareis mi
silencio, encerraos en vuestra alcantarilla, no salgáis de allí, cortaos
vuestras alas libremente y lameos mutuamente los culos, tragad vuestra mierda
como queráis, pero quiero que aprendéis el limite que no podéis cruzar ante un
artista libre, que no olvidéis nunca que no podéis volver a repetir vuestros
ataques a las obras libres y espontáneas, no olvidéis que sólo sois dioses para
aquellos mediocres que os siguen, ante mi no sois más que escoria fascista...
No quiero permitir que volváis a pretender doblegar, a asesinar, la libertad de otro individuo, su arte... no quiero ser un mero observador mientras arrastráis a uno más a Ultramordor, se acabó fachas, se acabó el silencio cómplice ante vuestras acciones...