dilluns, 26 d’octubre del 2015


























- Advertencia al cielo - 

"Hoy es el día en el que los que parecemos derrotados contaremos nuestro punto de vista, 
los esclavos se alzarán libres, querrán ser dioses también, 
y tú, esclavizador de almas, 
tú que quieres ser llamado “el único Dios”,
serás nuevamente desafiado."
Empatizando con Lucifer

Al que se hace llamar dios:

Oh tú! Sí, el que te haces decir “rey de las alturas”, “alfa y omega”, “señor y único dios”, “rey del cielo”... escucha lo que te vengo a decir, ya no puedes hacer nada para detenerme ¡para detenernos! El motín ya ha sido planeado ¡tienes tiempo hasta que yo termine estas palabras para salir de mi barco! Ha llegado la hora de que te saquemos la máscara con la que te presentaste... ya no estoy dispuesto a servirte, a ser tu instrumento, a realizarte... ¡ya no quiero ser esclavo! ¡Soy mi dios y el espacio que ocupas en mi vida es mío!

Esta es mi decisión, este es mi motín contra ti, si decides quedarte ¡YO te declaro la guerra! Y será la guerra de los que queremos ser dueños de nuestros actos, porque soy YO quien tiene que vivir mi vida, será la guerra de los que no entendemos ninguna autoridad, de los que no nos vemos mediocres, de los que somos conscientes de nuestro poder y no tenemos miedo a ejercerlo, los que nos queremos libres y no queremos adorar nada y nadie...

Seré guerrero si es necesario, y lucharé desde la tierra hasta que el cielo vuelva a ser claro para los hombres/mujeres, hasta que deje de ser una barrera y sea, de nuevo, una puerta hacia el infinito.

Esta guerra será divina, contra el usurpador de nuestra divinidad, porque los que nos atrevemos a hacerla no nos asustará ser nuestros dioses; no será una guerra de cobardes, no te equivoques, no buscamos venganza, en verdad no te quiero ningún mal, - como individuo soy libre y así me veo, necesito realizarme en libertad, este es el fin de mi lucha: un entorno de libertad; y si alguien, como tú, se pone delante: no recibirá venganza sino la respuesta, la defensa, de alguien que se quiere libre y no esclavo; no es justo este fin? Pues esta respuesta será justicia - buscamos la libertad, libertad para ser creadores ¡para ser! Y, así, esta guerra será justa, porque será en defensa frente tu agresión.

Y, antes de que empiece el conflicto, este es el grito que quiero trasladar al cielo, mi grito de guerra: "¡Aquí, en mí, no puedes realizarte! Yo soy YO y no una parte de ti, no quiero un dios que, para ser, tiene que pisar una parte de MÍ."

A ti y a todos los que os queréis erigir como líderes, como dueños... os digo: "La figura que representáis debe ser eliminada, no eliminando vuestro ser, sino renegando de esta figura, renegando de vuestro TÚ - foráneo a mí - realizando mi YO personal, es tan simple como: si soy dueño de YO mismo ¡ya no pueden ser dueños de mí!"

No vengo a intentar ocupar tu lugar en la humanidad ¡vengo a destruirlo! ¿Cómo? Haciendo mío tu lugar en mi ser, y cuando esto se generalice, cuando ello vaya pasando individuo tras individuo, cuando sean suficientes los que tensen de este trono en el que te sientas, de ese trono que tapa el cielo: caerás, dejarás de reinar los hombres, dejarás de ser rey desde las alturas... 

Cuando caigas y dejes de aplastarnos habrá quien llorará, todo aquel que tenga miedo a la libertad llorará, todo aquel que vivía la vida del dueño y no la suya llorará, porque se verá desaparecer; entonces se levantará un grito entre nosotros, un grito sereno, inequívocamente humano, divinamente humano:

Atentamente: YO

16/03/2015